"Nunca hemos dicho que se acabará el deporte, pero se podrían perder 65 años de éxito... pierde el buen beisbol, perdemos todos”

José Grasso Vecchio, hombre poco alarmista, ponderado y de comprobado recto proceder apretó el botón de alarma al conocer el contenido del proyecto Ley del Deporte. El presidente de la LVBP informó su punto de vista acerca de los riesgos de la Ley del Deporte y cómo podría verse afectada la libertad de los peloteros, el circuito, los equipos y la fanaticada si llegara a aprobarse.Grasso Vecchio se reunió en el Estadio de Beisbol de la Ciudad Universitaria, y habló en nombre de la liga y de las ocho divisas que conforman la pelota profesional.
El doctor Rafael Chavero, vicepresidente de la LVBP, solicitó que cualquier modificación que se pretenda hacer de la Ley del Deporte tome en cuenta la necesidad de garantizar la autonomía de las organizaciones deportivas, sin ningún tipo de restricciones, además de fomentar el patrocinio privado.
Los directivos de la Liga de Beisbol manifestaron preocupación por algunos artículos del instrumento que se discute en la Asamblea Nacional, como el artículo 9: “las actividades de promoción, organización, desarrollo y administración del deporte, la actividad física y educación física, se declaran de servicio público, pudiendo ser desarrollada por el Estado directamente o por particulares debidamente autorizados”.

“A la liga, equipos y peloteros se les elimina la libertad de decisión, ya que nosotros no podremos decidir nada. Ni quiénes serán los patrocinantes, cuáles contratos entre peloteros y equipos son aceptables, en qué fecha comenzarán los campeonatos y en qué estadios se jugará”, destacó el directivo.
Manifestaron intranquilidad acerca por la carrera por aprobar la Ley, lo que podría ocurrir el próximo 12 de julio.
“¿Por qué cambiar lo que hoy funciona bien y le gusta a la población? Queremos más beisbol y cada día más beisbol de calidad. Esto se logra con la participación de todos los venezolanos, el fortalecimiento de la iniciativa privada en el sector y con el Estado como colaborador y no controlando todo”
El proyecto estipula que el Ministerio del Deporte sería el ente que aprobaría o no el patrocinio para los equipos. Según el artículo 57, se crearía un fondo nacional para el Desarrollo del Deporte, que se constituiría con el apoyo de 1% de los ingresos brutos de las empresas u otras organizaciones que realicen actividades económicas en el país. “¿Quién hizo el estudio? ¿De dónde sacan que se puede hacer este aporte? Quisiera revisarlo y estudiarlo”, dijo Grasso Vecchio.
“La Liga, los peloteros y equipos perderían autonomía en sus decisiones, todo dependería de lo que autorice el Ministerio del Deporte”, estableció Grasso Vecchio. “Se pondrá en riesgo la competitividad del beisbol nacional. Los campeonatos deportivos más importantes y exitosos del mundo son privados y no son considerados de servicio público. Las Grandes Ligas, la NBA, la Liga Española de Fútbol, etc.”, agregó.
El presidente de la LVBP recordó que “nosotros no somos políticos, somos fanáticos del beisbol”, y dijo que no quiere que la política entre al estadio y que por lo tanto se quede afuera. “Si se llega aprobar la Ley, tendremos que aceptarla. Tanto la Liga como las franquicias somos serias. Nunca hemos dicho que se acabará el deporte, pero se podrían perder 65 años de éxito. Pierde el buen beisbol, perdemos todos”