Es histórico, aunque dudamos que se registre en los libros que el régimen imprime para el adoctrinamiento de niños y jóvenes en Venezuela.
Cuando el Teniente Coronel Hugo Chávez fracasó en su intento golpista, contra un gobierno elegido por el pueblo y con respaldo constitucional, se entregó en La Planicie sin disparar un solo tiro, tirar una sola trompada o un mordizco. Se puso en manos de sus captores y se entregó.
Más tarde, cuando el Alto Mando Militar le exigió la renuncia, "la cual entregó",
Hugo Chávez se rindió como una plañidera en el regazo de Monseñor Porras.
La diferencia está en que el Alcalde Mayor Metropolitano, Antonio Ledezma, el funcionario más votado en Caracas y sus alrededores, fue hecho preso por más de 150 esbirros armados hasta los dientes, disfrazados de Robocops, quienes le cayeron a golpes... La foto es posterior a la golpiza.
Es Historia
No hay comentarios:
Publicar un comentario