Blog de Víctor José López /Periodista

viernes, 25 de mayo de 2018

FARSA INDEFENDIBLE Luis F. Jiménez / Caretas

EE.UU., la Unión Europea y el Grupo de Lima rechazaron la farsa electoral en Venezuela. Ni la izquierda en el Congreso peruano protestó por el anuncio.

Edición 2540: Jueves, 24 de Mayo de 2018


En las elecciones presidenciales del 20 de mayo en Venezuela, todo salió como se preveía:
-Maduro fue reelegido hasta 2026 por un amplio margen.
-Henry Falcón, que rompió la unidad de la MUD por creer que aplastaba a Maduro, terminó denunciando fraude y sin reconocer el resultado electoral.
-Hubo una alta abstención; según el CNE un 52% y según el Frente Amplio (opositor) solo voto el 30%.
-Maduro obtuvo 5,8 millones, lejos de los 10 millones que había pedido a sus seguidores, lo cual revela sus conflictos internos.
-No reconocieron los resultados electorales Estados Unidos, la Unión Europea y el Grupo de Lima (Argentina, Brasil, Canadá, Chile, Colombia, Costa Rica, Guatemala, Guyana,  Honduras, México, Panamá, Paraguay, Perú y Santa Lucía).
-El Grupo de Lima convocó a sus embajadores en Venezuela a consultas (presagio de nuevas sanciones). Estados Unidos informó que consideraba medidas petroleras.
Hasta ahí llega lo previsible. Lo que ocurra a partir del 21 de mayo es imprevisible.
Nicolás Maduro anunció que convocaba a un gran diálogo nacional con miras a superar la crisis terminal que aqueja a Venezuela. Solo el exmandatario español José Luis Rodríguez Zapatero parece creer en el diálogo pues participa en todos ellos (y no debe ser gratis). La oposición, en la voz de María Corina Machado, ha convocado a un proceso creciente de desobediencia civil.
Autorretrato de un Dictador. Tras el fraude, dictador Nicolás Maduro convoca a “diálogo nacional”. Oposición impulsa desobediencia civil.
Autorretrato de un Dictador. Tras el fraude, dictador Nicolás Maduro convoca a “diálogo nacional”. Oposición impulsa desobediencia civil.
¿AHORA QUÉ?
La crisis económica, social, política y humanitaria, de dimensiones inusitadas, difícilmente podrá ser superada por quien la creó. Maduro ha convocado al sector privado para que colabore con él. Superar la crisis, sin embargo, exige medidas radicales y alejadas a sus planteos ideológicos y, especialmente, los de sus mentores cubanos.

La crisis solo se agudiza. El anuncio de EE.UU. de estar considerando sanciones petroleras, sumado a las acciones judiciales de Conoco Phillips que ganó un juicio por las expropiaciones de sus bienes por el gobierno de Chávez, ponen a una maltrecha industria petrolera venezolana al borde del colapso total.
Se sabe que PDVESA está produciendo 1,4 millones de barriles diarios de petróleo (el nivel de 1950). Viene cayendo de su producción máxima de 3,6 millones debido a la ineptitud (es manejada por generales sin antecedentes) y corrupción. El embargo de Conoco para cobrar su deuda, levanta el espectro de los embargos de embarque s de petróleo al exterior; ellos son la única fuente de ingreso del país.
La producción en picada y los graves problemas legales (que se suman al default técnico de la deuda de PDVESA) plantean una perspectiva más que complicada para Maduro y su gente, la mayoría de los cuales están sancionados por Estados Unidos, la Unión Europea y Panamá. La perspectiva que el Grupo de Lima se sume a las sanciones es una posibilidad cierta; sus ministros de finanzas participaron en la reunión que acaban de realizar en México.
Estados Unidos, por su parte, anunció que considera plantear el tema de las sanciones a Venezuela al G 20, que se reunió en Buenos Aires. El Grupo de Lima, en su comunicado conjunto del 21 de mayo sobre Venezuela, informó que está trabajando una resolución sobre ese país para someterla a la Asamblea General de la OEA que se realiza en Washington el 7 de junio próximo. En esa oportunidad, el Grupo de Lima planteará adoptar medidas para enfrentar las olas migratorias planteadas por la crisis venezolana.
En su comunicado también informó sobre las medidas adoptadas para proceder de acuerdo con las disposiciones constitucionales de Venezuela y las facultades que ellas conceden a la Asamblea Nacional, jaqueada por Maduro. Adelantó, asimismo, que los Estados están adoptando medidas para enfrentar la crisis sanitaria provocada por la aparición de enfermedades que son transmitidas por los migrantes venezolanos. El Grupo de Lima también afirma las medidas regionales para el combate contra la corrupción.
Junto con el colapso de la producción petrolera, debe tenerse presente la hiperinflación que afecta la economía venezolana. Los 14.000% previstos por el FMI para el año que paso podrían convertirse en 100.000% al finalizar el 2018. La moneda está, simplemente, pulverizada.
COORDINAR ANTES QUE SEA DEMASIADO TARDE
La magnitud de los problemas exige que así como se están adoptando medidas con respecto a los migrantes y los problemas sanitarios suscitados, comiencen a identificarse las medidas financieras que deberán adoptarse cuando se produzca el temido colapso. Los requerimientos para superar la crisis humanitaria en alimentos y medicinas deberán estar previstos. Los ingentes recursos financieros que exigirá estabilizar la vorágine inflacionaria y compensar los efectos sociales de la eliminación del déficit fiscal requerirán una planificación cuidadosa.
La OEA podría asumir la tarea de coordinar los diversos organismos internacionales que podrían asistir en esta ímproba tarea. La Reunión de Consulta –que está abierta– podría asumir esta tarea de coordinación, además de lo relativo a derechos humanos y democracia que tiene en su mandato. Si la sociedad venezolana colapsa y no existieran previsiones cómo enfrentar la situación, ello podría devenir en un caos inmanejable. Una verdadera amenaza a la paz y seguridad del hemisferio.

CIDH en Nicaragua
La Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) realizó una visita in situ a Nicaragua, con la anuencia del gobierno de este país, desde el 17 al 21 de mayo. Al finalizar la visita, la CIDH emitió sus observaciones preliminares sobre los graves hechos de violencia ocurridos en ese país (Ver http://www.oas.org/es/cidh/prensa/comunicados/2018/113.asp).

No hay comentarios: