TRÁGICA SUERTE DE QUIENES HAN DESCONOCIDO LA VOLUNTAD DEL PUEBLO DE VENEZUELAS

Ramón Peña 
Relatos salvajes                                                         Caracas, 27/6/2016

           “La libertad requiere de responsabilidad y compromiso, yo lo asumo”

Elder Solangel Pabón, joven médico pediatra, firmante amenazada de despido por orden del gobernador de Aragua

Septiembre de 1897. José Manuel Hernández, mejor conocido como El Mocho Hernández, combativo candidato de la oposición, gana las elecciones a la presidencia, pero el entonces gobernante, Joaquín Crespo, manda a ocupar las mesas electorales para imponer a Ignacio Andrade, su candidato.  El Mocho se alza en armas. En la batalla de la Mata Carmelera cae el propio Crespo abatido por un disparo mortal. 

Noviembre de 1957. El dictador Marcos Pérez Jiménez, aconsejado por su ministro Laureano Vallenilla Planchart, inventa un plebiscito electoral con la intención de eternizarse en la presidencia de la república. La sociedad lo rechaza con el voto, pero, con la complicidad del Consejo Supremo Electoral, se invierten los  resultados y es proclamado ganador. Dos meses más tarde es aventado del poder por una insurrección cívico-militar.

Junio de 2016. La oposición, cuya terminante mayoría fue demostrada el pasado 6 de diciembre, convoca el Referéndum Revocatorio del Presidente de la Republica. El régimen, ignominiosamente representado por el Consejo Nacional Electoral y la facción vandálica de las fuerzas armadas, despliega la mayor y más arrabalera panoplia de impedimentos, algunos descarados hasta lo ridículo, otros de crueldad casi enfermiza, para impedir la validación de la convocatoria. Malandrada inútil. La sociedad, con determinación y coraje épicos, los derrota y hace valer su derecho. Ahora, salvo un golpe de estado del régimen, no habrá nada que la detenga en su propósito liberador.