Provoca risa, sorna entre los
españoles, que Zapatero haya sido escogido como mediador de la terrible
situación que vive la sociedad
venezolana.
Así lo comentan, y así lo vivió en su día el
colombiano que se ríe que Samper sea quien vaya a encontrar soluciones a todo
lo demoniaco que se vice en Venezuela.
VÍCTOR JOSÉ LÓPEZ
desde Madrid
La obra de Zapatero fue
arruinar España, sembrar España de corrupción como lo hizo Hugo Chávez como ahora lo hace el tridente de la
fatalidad: Maduro, Cabello y Padrino López. Y Samper tiene el reconocimiento continental de
su acercamiento crematístico con los grupos, empresas y sociedades del Narco
que le apoyaron en su campaña política y fueron apoyados durante su gestión
presidencial.
Aquí en Madrid leo la noticia
que Diosdado Cabello ha ordenado expulsar tan pronto como llegue a Venezuela al
líder del partido Ciudadanos, Albert Rivera.
El joven político catalán tiene previsto intervenir el próximo martes en la
sesión de la Asamblea Nacional, y, Maduro, se ufana de la detención de Coromoto
Rodríguez, Jefe de Seguridad de Ramos Allup.
Qué cosas tiene la vida en
Venezuela, pues mientras el 98 por
ciento de los crímenes en el país disfrutan de la impunidad con la que el
régimen cubre el delito público, la
persecución de la Justicia a los inocentes marca máximos de rapidez y
velocidad.
Cierro esta nota desde Madrid
muerto de la risa, simplemente imaginándome la cara, la expresión y el comentario
Nicolás cuando le enteraban del calificativo de Pepe Mujica, que él, Maduro,
está loco.
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