VÍCTOR JOSÉ LÓPEZ
Ahogado por la rabia y la angustia al verse fuera de la
patota, el malandro de Mario Silva acusó de "mala conducta" hasta los
que hace poco fueron sus compañeros. Encendió el ventilador para regar con
ofensas, falsos testimonios, mentiras, traiciones, espantoso uso del procaz
lenguaje ante Aramís Palacio, del G2 de Cuba, en una grabación realizada por él
mismo para que el espía antillano la remita a su jefe, el jefe de Mario Silva y
de los invasores militares cubanos que hacen vida imperial en Venezuela, Raúl
Castro.
Esta grabación,
tan esperada por los venezolanos, había sido anunciada por Henrique Capriles,
en varios twits (trinos) la noche del domingo. Transmitida por Globovisión,
NTN24 y CNN, sin que, como esperaron mucho,s fuera interrumpida por una cadena
ordenada por el Ministerio de Información.
En este documento, de evidentes rasgos escatológicos, ha de
ser un parte aguas en la historia del chavismo. No podía ser de otra, en la voz
de Mario Silva. En una hora de grabación Silva le narra al oficial invasor, con
su estilo fétido y vulgar, los relatos que provocan sus quejas con las que
pretende, como buen acuseta, descalificar a sus compañeros de causa.
Narra varios acontecimientos, donde la traición, la
ambición, la corrupción, la infidelidad, la mentira, el fraude ... Los males
que arropan la nación, sembrados por el castrocomunismo y que ahora, en el
ocaso del chavismo, afloran en el teatro político del partido de los herederos
de Chávez.
Acusa con saña a Diosdado Cabello de ladrón, ambicioso y de
traidor. A Maduro lo califica de un loquito que escucha pajaritos y ve visiones
como un bolsa bajo el dominio de su esposa Cilia. Confirma la fama de José
Vicente Rangel, como traficante de armas y traidor de la causa patriotica.
Todas estas acusaciones subrayando permanentemente, como talismán para la
salvación de su alma, su fidelidad al Marxismo y su militancia en el Ateismo.
Sin embargo Mario Silva defiende al Ministro de la Defensa,
el Almirante Molero, y al ex ministro Rangel Silva. Denosta de la Clase de
1985, y vuela como garza blanca sobre la ciénega de su fétido relato cuando de
los militares se trata.
Fueron muchas las citas, los nombres, los hechos abominables como los fraudes sostenidos
y continuados en los procesos electorales, de los que Chávez tuvo conocimiento
y que Fidel Castro recomendaba cesaran los procesos electorales porque en ellos
estaba la tumba de la revolución chavista.
Resumiríamos diciendo en que no se dijo nada que no
supiéramos, sí se confirmó lo que se sospechaba y que como palas de enterrador
se abrió aún más la fosa para enterrar este régimen, que destruye la nación y
que para recuperarla necesitamos
jun proyecto de Reconciliación y de Reconstrucción
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