EDITORIAL de VENEZUELA ANALÍTICA
El asalto al camión de basura
No hubo en el asalto al camión de basura en un sector de Guatire, la decisión de un abusador ni mucho menos de una autoridad con voluntad de resolver
Un grupo de vecinos de un sector de Guatire asaltaron, casi podríamos decir que secuestraron, un camión de basura; hartos de ver cómo los desechos se acumulaban en sus calles, actuaron por su cuenta, rodearon al camión, lo escoltaron hasta el vertedero de El Rodeo para que vaciara su apestosa carga, después lo hicieron ir a su comunidad para que recogiera los montones de basura acumulada por muchos días no recogida.
Para las autoridades del Municipio de Zamora puede que sea un acto delictivo. Para las autoridades del país, el chavismo en general y los dirigentes y partidos de la oposición debería ser una señal de alarma. El síntoma de que los vecinos están cansándose de esperar y de protestar, y que empiezan a pensar como ciudadanos libres y con iniciativa propia, dispuestos a resolver los problemas que las autoridades no solucionan.
No es un problema nacional, es un síntoma, pero deberían tomarlo en cuenta porque iniciativas como ésta, no necesariamente violentas, se sabe cuándo empiezan pero no cuando terminan. Mucho de la propaganda del chavismo ha estado centrada a lo largo de ya casi 13 años en un concepto que ahora se usa menos, pero que es real: el “empoderamiento” del pueblo. Durante muchos años el Gobierno y los políticos de uno y otro lado han afirmado trabajar para el pueblo y hablar en su nombre, a la vez que el Gobierno creaba todo tipo de organizaciones populares –o comunales, si a usted le suena mejor- pero que en su mayoría han terminado no sólo politizadas, carnetizadas, sino que además funcionan poco o nada justamente porque han “empoderado” al pueblo pero ni han resuelto sus problemas ni le han dado el poder para resolverlos por su cuenta. Y esa falla va desde las grandes estructuras nacionales, como la eléctrica, hasta los más modestos consejos comunales.
No hubo en el asalto al camión de basura la decisión de un abusador ni mucho menos de una autoridad con voluntad de resolver. Hubo un destello de Fuenteovejuna, obra de teatro que los dirigentes del Gobierno y de la oposición deberían leer con detalle y analizar.
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