El verdadero bloqueo en el país ha sido a los mejores técnicos y gerentes y a las políticas sensatas
Entrevista diario El Tiempo (Oriente)
Enero 29, 2023
Para el ex presidente de la extinta Palmaven y ex coordinador de Gente del Petróleo, Eddie Ramírez, las supuestas medidas coercitivas que denuncia el régimen en contra de Venezuela no son más que un mito, ya que -compara- Irán tiene sanciones más severas y produjo 2 millones 554 mil b/d el año pasado, mientras “el país perdió 1 millón 824 mil b/d debido a incompetencia de las directivas rojas”.
P–¿Cuál cargo hubiera ocupado la nueva vice presidenta de finanzas de Pdvsa cuando esta era la segunda empresa petrolera más grande del mundo?
R–Pasantía durante tres meses para evaluarla en el cargo de analista.
P–¿Con qué compara la debacle de la industria petrolera?
R-Con la debacle de la educación, salud, sueldos y pensiones.
P-Según el madurismo, Pdvsa dejó de percibir 214 mil millones de dólares debido a las medidas coercitivas contra Venezuela…
R–El bloqueo es un mito. Se decidió dejar de vender petróleo a Estados Unidos para venderlo a China e India. Se consiguió recursos a través de Rusia, China, Irán y Turquía. Irán tiene sanciones más severas y produjo 2 millones 554 mil barriles por día el año pasado.
P–¿Hasta qué punto el “bloqueo” norteamericano es causante de la crisis económica venezolana?
R–El verdadero bloqueo ha sido a los mejores técnicos y gerentes y a políticas económicas sensatas.
P–¿Y de la drástica reducción de la producción petrolera?
R–En el 2001 la producción fue de 3 millones 340 mil barriles por día. En el 2018, o sea antes de las sanciones, fue de solo 1 millón 516 mil barriles por día, es decir perdimos 1 millón 824 ml barriles por día debido a incompetencia de las directivas rojas.
Muerte al ambiente
P–Ex presidente de Palmaven, ¿qué pasó realmente con esa filial?
R–Fue como matar un ruiseñor. Realizaba actividades ambientales, de asistencia técnica a los agricultores, trabajaba con las comunidades y otros actores para mejorar el ingreso familiar en armonía con el ambiente. Promovía empresas mixtas en el área de tecnología agrícola y mejoramiento de cultivos.
P–¿Qué pasará con Citgo?
R–Estaba a punto de perderse por deudas, para enviar dinero a Maduro y no para invertir en la empresa. La nueva gerencia la puso a valer, pero hay demandas por esas deudas y por expropiaciones de empresas en Venezuela.
P–¿Y con los diputados de la oposición que respaldaron la salida de Juan Guaidó?
R–Perjudicaron nuestras relaciones internacionales y la protección de activos en el exterior. Podrían dedicarse a brincar talanqueras.
P–¿Quién debería ser el candidato de la oposición para las elecciones de 2024?
R–Quien salga electo en las primarias.
P–Al paso que va, ¿qué vislumbra en el sector opositor venezolano?
R–Como diría Betancourt, muchos ya son cadáveres insepultos. Surgirán otros.
P–¿Habrá elecciones libres y confiables con Maduro en el poder?
R–Desde luego que no. Es un medio de lucha. Ganamos si nos unimos alrededor de un buen candidato. Si Jalisco arrebata se llevará una sorpresa.
P–¿Están dadas las condiciones para la salida de Maduro?
R–En este momento no, pero nunca se sabe. Las protestas de los educadores, de las empresas del Guayana y de los jubilados lo están haciendo temblar.
P–¿Qué sintió cuando Chávez lo despidió públicamente en abril de 2002?
R–Me despidió dos veces. El 7 de abril 2002 en la lucha en defensa de la meritocracia y en abril 2003, después de tener cuatro meses de jubilado. Fue lo mejor que me ha pasado, ya que he conocido a valiosos compañeros que sacrificaron su bienestar en defensa de principios y valores.
P–Ex coordinador nacional de Gente del Petróleo, ¿qué pasó con esa gente?
R–Gente del Petróleo sigue vivita y coleando, con delegados en casi todos los estados y bajo la coordinación de Beatriz García.
P–¿Ha llorado por la situación actual de Pdvsa?
R–Solo lloran quienes no tienen energía para luchar.
Pasado y presente
P–20 años después, el Gobierno sigue recordando las pérdidas durante el paro petrolero entre 2002 y 2003…
R–Esas pérdidas por el petróleo que se dejó de exportar y la gasolina que tuvo que importarse son una migaja comparada con la caída de la producción, la destrucción de las refinerías y las importaciones de petróleo liviano y gasolina desde Irán.
P–¿Hubo algún error en aquella protesta?
R–El régimen estaba preparado para enfrentar el paro cívico. Nosotros decidimos que los principios y valores hay que practicarlos, predicarlos y sobre todo defenderlos, independientemente de los resultados.
P–¿Qué pasó con su pensión?
R–Nunca llegué a cobrarla. De todos modos, hoy sería sal y agua.
P–Residenciado en Canadá desde 2011, ¿qué extraña de Venezuela?
R–Realmente, desde fines del 2014 extraño la democracia que tuvimos, imperfecta, pero perfectible. Desde luego a las amistades y familiares
P–¿Qué no extraña?
R–La falta de agua, de electricidad, de gasolina, los abusos de policías y guardias nacionales.
P–¿Extraña la palabra “meritocracia”?
R–La defiendo todos los días.
P–De viajar en una máquina del tiempo, ¿qué evitaría de lo ocurrido el 11-A?
R–A los 18 asesinados.
P–¿De qué se arrepiente?
R–Como dice la canción de Edith Piaf “je ne regrette rien”. No me arrepiento de nada.
P–Cómo filial agrícola de Pdvsa, ¿qué sembró Palmaven en Venezuela?
R–Una manera diferente de practicar la responsabilidad social, educando y trabajando juntó con las comunidades y otros actores.
P–¿Qué no sembró la clase política durante la democracia para haber llegado a este llegadero?
R–Formó excelentes profesionales, pero no buenos ciudadanos.
P–¿El mejor presidente de Pdvsa?
R–Hasta 1999, todos sumaron. Después solo Guaicaipuro Lameda. Los otros hundieron a la segunda empresa petrolera del mundo.
P–Con más de 90% de impopularidad ¿cómo es que se mantiene un régimen tan populista?
R–Por el apoyo del Alto Mando Militar y del Poder Judicial.
P–¿Es recuperable Pdvsa?
R–Definitivamente no. El Estado no debería tener empresas. Tarde o temprano las politizan.
P–¿Volverá a Venezuela el ¡Ni un paso atrás?
R–Debe volver; hay que luchar contra la corrupción y las violaciones a la meritocracia.
P–¿Volvería usted?
R–¿A qué? Se me olvidó la agricultura y no llegué a aprender de petróleo. Eso sin mencionar la edad, de cuyo monto no quiero acordarme.
De perfil
Eddie Ramírez es ingeniero agrónomo, Magister Scientiae en Entomología y Diploma Postgrado Economía Agrícola. Fue vicepresidente ejecutivo de la Fundación Servicio Para el Agricultor (Fusagri), Presidente de Palmaven, filial de Pdvsa, Miembro de las directivas de varias asociaciones civiles. Miembro Honorario de la Sociedad de Ingenieros Petroleros. Coordinador Nacional de la Asociación Civil Gente del Petróleo. Autor de dos libros y coautor de otros tres. Articulista semanal de seis portales digitales.
Caracas / Jolguer Rodríguez Costa
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