La división White Hat del ejército de EE. UU. arrestó el lunes a uno de sus propios oficiales después de enterarse de que había abusado de su posición para inyectar datos engañosos y falsos en la red informática Mar-a-Lago de Trump y conspiró con el director del FBI, Christopher Wray, para hundir el 2024 de Trump. aspiraciones presidenciales por cualquier medio necesario, dijeron fuentes de la Oficina del General David H. Berger a Real Raw News.
Aproximadamente a las 10:30 a. m., los infantes de marina de los EE. UU. bajo la autoridad del general Berger irrumpieron en una sala de conferencias de Fort Gordon, hogar del Comando Cibernético de los EE. J. Trump de persecución ilegal. Los infantes de marina armados mantuvieron a raya a los asistentes mientras el comandante del pelotón, un segundo teniente (O-1) entregó a la general Barrett una orden de arresto militar acusándola de sedición, conducta impropia de un oficial y traición. La esposaron y la escoltaron fuera de la base. Los infantes de marina también detuvieron a Ronald W. Pontius, adjunto civil del Comandante General del Comando Cibernético del Ejército de EE. UU.
Es importante tener en cuenta que Fort Gordon ha sido un bastión de White Hat desde que Biden robó las elecciones presidenciales de 2020, y su personal ha desempeñado un papel clave en la recopilación de pruebas que ayudaron a JAG a asegurar las condenas contra los viles provocadores del Estado Profundo. En un momento, la general Barrett denunció el ascenso de Biden a la Casa Blanca como una afrenta a la democracia y dijo que emplearía todos los recursos a su disposición para demostrar que Donald J. Trump había ganado las elecciones de 2020. Sus acciones, sin embargo, contradecían las declaraciones que había hecho.
Según una declaración de hechos de JAG, el general Barrett el 9 de agosto, un día después de la redada inconstitucional del FBI en la propiedad de Trump, insertó en la red de Mar-a-Lago un documento con la firma falsificada del presidente Trump. El documento, que imitaba la retórica de Trump, pedía a los patriotas de todo el país dar un golpe violento contra las personas que apoyaron la redada del FBI en Mar-a-Lago. “Toma las armas, ahora, y prepárate para luchar, matar al Estado Profundo”, escribió parte de la carta. Barrett había implantado en el mensaje un "trabajo de Cron" que, de no haber sido detectado, habría distribuido el correo electrónico a casi todas las personas en cada una de las listas de correo del presidente Trump. Si el mensaje se hubiera dado públicamente, podría haber provocado una bandera falsa que resultó en la muerte de cientos de miles de ciudadanos estadounidenses patriotas y temerosos de Dios.
“Barrett es un producto de la política de identidad. Ella tiene un conocimiento limitado del campo. Su inexperiencia ayudó a provocar su caída”, dijo un oficial de la Marina a Real Raw News.
Afortunadamente, un oficial del Comando Cibernético del Ejército de EE. UU. con un título real en seguridad cibernética descubrió el mensaje traidor de Barrett solo unas horas antes de que se hubiera enviado a 70 millones de personas. El mayor general Neil S. Hersey, subcomandante general del Comando Cibernético del Ejército de los EE. UU., informó de inmediato tanto al presidente Trump como al equipo de seguridad de Mar-a-Lago sobre el mensaje erróneo, que fue eliminado de inmediato.
“Barrett es un agente doble”, dijo nuestra fuente. “Entre sus compañeros, apoyó a Trump, pero trabajó en secreto para su desaparición. JAG tiene pruebas sólidas”.
Parte de esa prueba incluye una carta que Barrett envió al director del FBI, Christopher Wray. “Trump está acabado. Lo tenemos”, decía parte de él.
La general Barrett, dijo nuestra fuente, ha sido despojada de su rango y enviada a la Bahía de Guantánamo, donde esperará un tribunal militar. Mientras tanto, el general patriota Hersey ha sido nombrado comandante interino del Comando Cibernético del Ejército de EE. UU.
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