La derrota parlamentaria que acaba de sufrir el kirtchnerismo, abre una serie de interrogantes en el inmenso país sureño; pero con grandes implicaciones en todo el subcontinente.
No es solamente que la mandataria haya perdido la mayoría parlamentaria que le impida siquiera soñar en una modificación Constitucional para un tercer mandato, opción a la que se sumaron sus colegas Correa, Morales y Noriega, todos en la onda de Hugo Chávez, sino que su propia salud crea serias dudas en cuanto a que pueda siquiera reincoporarse a completar su presente período presidencial.
Evasivo y hasta un tanto grosero se mostró su hijo al preguntarle cuándo reaparecería la madre en la Casa Rosada, en una suerte de funcionarios venezolanos al preguntárseles por la salud del extinto Chávez:
-No soy médico para responder a esas preguntas-
Al parecer no se encuentra en condiciones de hacerlo y hasta es posible "que una situación sobrevenida le imposiblite volver al Gobierno". Tal cosa significaría un durísimo golpe para el ktchnerismo en Argentina, donde ya dirigentes que adversan a Cistina comienzan a saltar la talanquera y a cuadrarse con miras a un futuro gobierno, sino que comienzan asimismo a derribarse los sueños de un socialismo Siglo XXI que ya se nota como una utopía sin ningùn basamento, máxime cuando en Venezuela ese proyecto se derrumba a pasos agigantados.
La posibilidad de una ausencia definitiva de la presidenta Fernández estaría en la misma onda de lo que acontece en Venezuela. Sin una clara ideología estos movimientos presidencialiastas y electoreros sobreviven en tanto sus líderes conservan el poder. Desapaecidos aquellos sus cuadros dirigenciales quedan a la deriva en procura de un árbol que les de sombra. Así como no puede existir chavismo sin Chávez, de igual manera ida la Kirchner, el kitrchnerismo no tendrá razón de ser
No hay comentarios:
Publicar un comentario