Hechos totalmente impunes, en diez años ni una sola de las investigaciones del "poder judiicial" ha llegado a término. Atentan contra el patrimonio de la UCV, agreden a la comunidad ucevista verbal y físicamente, están armados con armas largas, explosivos molotof y bombas lacrimógenas , quieren imponer su visión de la universidad por las malas y se saben protregidos por el poder que los muestra como víctimas y como heroes de la revolución. Paralelamente la asfixia económica va medrando al punto que no hay posibilidades de funcionamiento normal, el sueldo máximo de un titular a dedicación exclusiva no alcanza ni para el mercado, que quedará para los otros, no hay reposición de cargos y los que pueden buscan mejores horizontes y en los alrededores de la UCV la delincuancia campea libremente junto con la venta de drogas y los buhoneros sin control. La universidad requiere renovarse en medio de un debate plural de ideas, condiciones y medios justos, sin acoso ni violencia fundamentalista y sectaria, de lo contrario el resultado está a la vista: retroceso y barbarie.
Contraportada TAL CUAL (09 DE NOVIEMBRE 2007)
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