Blog de Víctor José López /Periodista

lunes, 4 de junio de 2018

EL KARMA Y CASTIGO DE LOS GOBIERNOS APOROFÓBICOS Egildo Luján Nava




                                                                                                                         Formato del Futuro… 

En estos días de angustias, incertidumbre y temores, y en los que la principal preocupación, es no saber cómo lograr la compra de la canasta alimentaria imprescindible para satisfacer las necesidades familiares, saberse obligado a rezar para que ningún miembro de la misma se enferme y haya que entrar en la peregrina tarea de mendigar por algún medicamento, se planteó la valiosa oportunidad para sostener una inolvidable conversación.

Fue la que sostuvimos  con uno de esos amigos  que Dios le pone a sus hijos en el camino, y que, a fuerza de afinidad, consecuencia, respeto y solidaridad, terminan convirtiéndose en hermanos.  Se trata del abogado Néstor Contreras, un profesional de vieja data y profunda sabiduría; un cuidadoso observador de aciertos y desaciertos. Y, además, un incansable escudriñador del ir y venir de la situación sociopolítica nacional, como de todo aquello que se escribe a diario dentro y fuera de Venezuela, además de las disposiciones jurídicas que van llenando el devenir administrativo del país.

¿Tema obligado?. Todos los son. Aunque hay algunos que mueven a  la atención permanente, como es el caso de que son realmente delitos o crímenes de “lesa humanidad”. ¿Y en qué consiste realmente una violación de derechos humanos?. Lo cierto es que de un sabroso y enriquecedor diálogo, emergieron apreciaciones, comparaciones, indicaciones ejemplarizantes. Un encuentro con lo desconocido o ignorado, hasta concluir en identificaciones que más nunca serán causa de sorpresas.

Al analizar la responsabilidad de los posibles actores de la dramática situación que vive el país, por ejemplo, nuestro contertulio calificó al Gobierno de cometer sistemáticamente el delito de "APAROFOBIA" en contra de los ciudadanos.  Es decir, recurrió a una calificación que, según el actual amigo de todos los que acuden a él, como es  “Google”, y atendiendo a las sugerencias de otro amigo de larga y muy educativa trayectoria televisiva, como es el doctor Eladio Lares, precisaba lo siguiente:"APOROFOBIA": neologismo que da nombre al miedo; rechazo o aversión a los pobres”. Para  mayor y valioso añadido conceptual, dicha expresión ha sido elegida la palabra del año 2017 por la Fundación del Español Urgente, promovida por la Agencia de Noticias Efe y el  Banco Bilbao Vizcaya.

Desde luego, al analizar dicho concepto en relación a los gobiernos de corte dictatorial, es inevitable concluir en que todos ellos, sin excepción,  apelan al recurso del empobrecimiento de  la población al máximo, para luego, obviamente, por hambre y miedo, someterla el control de la seguridad, la justicia manipulada y la restringida distribución de medicinas y alimentos.

Ante dicha alternativa, es imprescindible eliminar la clase media, como aquella de  mayores recursos, porque son ellas las que actuarán como las principales  expresiones de la oposición. Desde luego, si dichos segmentos sociales y económicos optan por la migración, bienvenida su conversión en diáspora, porque, con su ausencia, desaparecen la resistencia, el cuestionamiento, la organización estructural del rechazo al acto represivo.

Los gobiernos de corte dictatorial que tanto daño le han generado históricamente a la humanidad, desde luego, siempre han podido manifestarse con seguridad y dominio colectivo en los países del tercer mundo. Mejor dicho, en aquellos  en los que prevalecen mayoritariamente las poblaciones empobrecidas y en los que para ese tipo de régimen, se hace mucho más fácil el prolongado mantenimiento de dicha condición social y económica.  Sometidos por hambre, hombres y mujeres, por igual, pasan a ser el soporte del control del poder de otros. Pero también víctimas de un delito de APAROFOBIA.

La conclusión de la conversación, después de múltiples evaluaciones históricas de los diversos y más cercanos ejemplos, sin duda alguna, no podía ser otra:  los gobiernos dictatoriales que abrigan la esperanza de ser eternos en el poder, al final, terminan convirtiéndose en el epicentro de finales no siempre racionales. Porque por el hecho de desconocer intencionalmente que el hombre es un animal racional,  capaz de pensar y de actuar inteligentemente, se incurre en el error de desconocer que  también depende de sentimientos, y que no siempre son hechos fáciles para el sometimiento.

Ese individuo, hambriento, equivocadamente anulado, puede reaccionar con violencia al sentirse anulado, indefenso y acorralado para ejercer su derecho a encontrarle salida a su situación y condición inducida. Dicha reacción, ayer pudo haber sido llamada desorden público y hasta violencia irracional. Hoy, quizás más ajustada a un proceso evolutivo, en razón del propio avance de las normas legales, se les identifica como explosión social, quizás en atención a la previa identificación de lo que es capaz de generar, lo cual no es otra cosa que  consecuencias impredecibles.

La APAROFOBIA, entonces, nunca ha estado ausente de la historia política humana. Y eso lo dice hasta el buen amigo “Google”, que, como complemento a lo que en algún momento pas a ser columna vertebral de la conversación entre dos amigos, también es un útil recurso bibliográfico para identificar nombres de países en los que el procedimiento restrictivo humano nunca terminó como lo desearon los que apostaron a ser eternos amos del poder. Además de describir   cómo y cuáles han sido las consecuencias al término de cada uno de estos gobiernos dictatoriales que  incurrieron en el error de creerse eternos.

Egildo Luján Nava
Coordinador Nacional de Independientes Por el Progreso (IPP)

No hay comentarios: