Blog de Víctor José López /Periodista

viernes, 27 de febrero de 2015

POMPEYO MÁRQUEZ Dictadura vs Unidad


Junto a María Corina, Antonio y Leopoldo López se han convertido en símbolo en la lucha por la libertad de todos los presos políticos, el regreso de los exiliados, la democracia y la república civil


POMPEYO MÁRQUEZ

Cuando Pérez Jiménez dio el golpe de Estado el 2 de diciembre de 1952 se abrió una etapa de terror que recordaba al gomecismo y a Cipriano Castro. O sea, dictaduras militares que gobiernan bajo el terror para infundir miedo a la población.
Del 2 de diciembre del 52 a 1956 no se movía casi nada contra la dictadura, apenas Tribuna Popular clandestina reducida a 4 página de un octavo, con una circulación limitada por la represión.
En 1956 nos dimos cuenta que cada uno por separado no tendría éxito y surgió con gran fuerza, por la propia realidad, la idea de la unidad nacional. El primero de mayo de 1957 Monseñor Arias anuncia su Pastoral donde desnuda socialmente a la dictadura.
En 1957 según Simón Alberto Consalvi, Venezuela perdió el miedo. El dictador nos vio a todos unidos en moentos en que se acercaba la elección presidencial de una forma directa que no había sido borrada de la Constitución pérezjimenista de 1953.
Se produce la huelga en el liceo Fermín Toro y luego la huelga universitaria del 21 de noviembre. El dictador cuando ve todos estos movimientos unitarios da un autogolpe y en lugar de la elección directa del presidente lanza un decreto llamando aun plesbicito para una Constituyente.
En ese momento cuando habíamos escogido el camino electoral llamamos entonces a la abstención donde obtenemos un relativo éxito a pesar del control del Consejo Supremo Electoral, y de la utulización de todos los recursos del Estado a favor del régimen dictatorial. El 15 de diciembre se realizan las elecciones. Como decíamos se obtiene un relativo éxito muy indicativo de que la dictadura militar no gozaba de mayor prestigio.
El primero de enero de 1958 se alzan Hugo Trejo y Martín Parada que demostraba que no había homogeneidad en las fuerzas armadas. A partir de ese momento se pasó a la ofensiva, se declaró la huelga de la prensa y huelga general en Caracas y el dictador huye.
Este relato es indicativo de que las dictaduras tienen pies de barro. La represión contra Ledezma, como dijo Fernando Mires traspasó la raya. La ola de protestas nacionales e internacionales crece cada día. La dictadura está acorralada.
María Corina, Antonio Ledezma y Leopoldo López se han convertido en símbolo en la lucha por la libertad de todos los presos, el regreso de los exiliados, la democracia y la república civil.
Ante la permanente amenaza del régimen a la libertad de expresión y de prensa, rodeamos de solidaridad a TalCual y a Teodoro Petkoff y su valiente equipo y le pedimos a Fernando Rodríguez que rectifique y que continúe aportando su inteligencia a ese estilo propio que ha caracterizado a  TalCual.

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