Vladimir Villegas y Nicolás
Maduro se han convertido en heraldos de
las noticias que llegan desde Cuba, la información que los hermanos Fidel y Raúl Castro consideran debe conocer la nación venezolana. No deja de ser
vergonzoso, porque muchos venezolanos no estamos dispuestos a leer cartillas
para conocer la realidad que nos rodea.
No sorprende la vocación eucarística de Maduro, ya que nos consta que por su presidente comandante
sería capaz de subir al Himalaya o descender a las profundidades del mar de Los
Sargazos y ser capaz de
calificarlo como el Mar de la Felicidad.
Sí nos sorprende, más bien decepciona Vladimir, que acepta sin protesta o reparo lo que le envían Fidel y Raúl.
No sólo transcribe el galimatías médico de sus jefes cubanos, sino que tiene las
bolas de gritar al final de su lectura que "¡Viva Chávez!"
Vale indicar en este OÍDO EN LA CHATA que es grito de clamor
el pretender leer, escuchar o conocer aunque sea una línea de un parte escrito
por un médico que se identifique con nombre, apellido y especialización....
Mientras Maduro
habla de "amor", Diosdado
de "paz" y Villegas de
"recuperar signos vitales" -¿acaso estaba muerto?- en el campus de la
Universidad Central estallan niples y bombas y los encapuchados, herederos Elías
Jaua, siembran el terror.
#queremospartemedico
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